Dándole razón al señor Bunbury, persona que en su momento con su antigua banda Héroes del Silencio, pronunciaron mi punto de inflexión musical, hacia nuevos caminos que abrieron puertas muy distintas cada una de ellas, y de las cuales, todas tenían una cerradura que se abría con mi llave maestra...en realida hay muy poca gente.
Los días son cada vez más estresantes y hoy, después de levantarme a las seis, empezar a trabajar dormido, despues de dormir cinco horas y pico, hasta la una y media, correr a natación y nadar durante una hora, comer de prisa, volver al curro a las cuatro hasta las seis. Trabajo que me obliga a solucionar problemas cada cinco minutos, por la gran política del artículo número uno...osea por cojones, es lo que tiene la logística de una empresa grande....estoy muy cansado. Aún así, deseando que llegue mañana, porque faltará un día menos para el viernes y entonces llega el ensayo..donde ser libre y dejar fluir los sentimientos a través de la guitarra y la voz, y notar como mi estrés semanal sufre una especie de ósmosis, convirtiéndose en melodías y risas con mis colegas. Una mezcla que es pura droga para mis venas.
Y hoy me sirvo de la escritura automática para respirar hondo, profundo y soltar amarras a la imaginación. Sé que problemas tenemos todos. Y que quede claro que no me estoy quejando. Solo hacer un inciso, a esa libertad que todos deseamos y que ninguno, repito, ninguno tenemos.
Libertad, estoy a tope y viviendo a jierro, comiéndome los problemas como si de aperitivos se trataran, para poder poco a poco acercarme un mucho a ti.
Ya! ya lo se! no te atraparé, pero tampoco te dejaré descansar a tí, tendrás que estar siempre alerta, asustada y huyendo porque siempre tendrás las certeza de que Esencia te esta recortando terreno. Si yo no puedo atraparte, tu no descansarás jamás.
A ver quién puede más, tu leyenda o mis cojones. Uy perdón por decir... COJONES!!!
